“Lo que conduce y arrastra al mundo no son las máquinas sino las ideas”
Victor Hugo
Las citas siempre me han parecido una fuente de inspiración y una de las mejores maneras de trasladar y concretar ideas y reflexiones. Por eso, me ha parecido interesante asociar algunas de ellas, a las que podríamos considerar las siete claves de la transformación de las organizaciones en la era digital:
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Situar al cliente en el centro de la estrategia y la actividad
“Recuerda que lo más importante respecto a cualquier empresa, es que los resultados no están en el interior de sus paredes. El resultado de un buen negocio es un cliente satisfecho.” Peter Drucker
Aunque resulte repetitivo, siempre resulta útil recordar, que la esencia de la transformación de las organizaciones en esta era de cambios continuos es situar al cliente, realmente, en el centro de su estrategia y de su actividad.
Posiblemente en este segundo ámbito, en el de la actividad, es en el que resulta más complicado ejecutarlo. Sin duda en todas las estrategias el cliente es la prioridad pero, ¿qué ocurre en la práctica?, ¿prima el cliente o los resultados a corto materializados en productos, ¿prima la calidad, es decir el cliente o los costes?
En un mercado tremendamente competitivo como el actual, el cliente ha adquirido “superpoderes”, está conectado, más informado, le gusta experimentar y compartir y puede comparar y realizar sus operaciones en tiempo real.
Por tanto, es imprescindible hacer que las organizaciones evolucionen hacia esta nueva realidad, que requiere, como mínimo, de esa visión del cliente, rediseñar la oferta valor, agilizar la toma de decisiones y desarrollar las capacidades de sus profesionales.
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Priorizar la gestión del cambio. Cultura y personas
“Las personas cambian cuando se dan cuenta del potencial que tienen para cambiar las cosas”. Paulo Coelho
Como analizábamos en el post de la semana pasada, la cultura y gestión del cambio aparecen como prioridades en todos los procesos de transformación de las organizaciones.
Es indiscutible que tener una cultura fuerte que desarrolle el propósito de la compañía es un factor diferencial para obtener el éxito deseado en la transformación.
Una acción que se ha convertido en determinante es la lucha contra el statu quo, la bacteria más resistente al cambio como la vengo denominando.
Comunicar de forma clara, sistemática y bidireccional, eliminar rutinas obsoletas, acompañar a los profesionales en su proceso de cambio, evolucionar el entorno y dirigir con el ejemplo, resultan elementos clave a la hora de avanzar en la dirección correcta del cambio.
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Considerar el dato como un activo estratégico
“El auténtico genio consiste en la capacidad para evaluar información incierta, aleatoria y contradictoria”. Winston Churchill
Priorizar la gestión del dato, impone a las organizaciones desarrollar una cultura que fomente la colaboración entre las personas y las áreas, que sea flexible, que elimine jerarquías y que promueva el aprendizaje y la innovación.
Tomar decisiones en función de los datos significa empoderar a los equipos y agilizar los procesos de la organización. No tiene ningún sentido invertir en recursos (tecnología, especialistas, formación, etc.) y mantener los procesos actuales.
La gestión inteligente de los datos no solo tiene que facilitar la experiencia de los clientes, sino que también tiene que significar un cambio importante en el funcionamiento interno de las compañías, que se tiene que ver reflejado en su estructura organizativa y eficiencia.
La incorporación de la Inteligencia Artificial y Machine Learning, como hoy están haciendo un buen número de empresas, es un elemento de máxima importancia para obtener los mejores resultados de la información disponible.
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Promover la colaboración como un valor clave de la organización
“En el pasado tú eras lo que tenías, ahora eres lo que compartes”. Godfried Bogaard
La era digital es la era de la colaboración. Hoy se trabaja de otra manera, realmente se vive de otra manera.
Como dice José Cabrera “la colaboración es la forma mas poderosa de crear valor, esto es así porque la clave ya no está en el trabajo individual, sino en el trabajo compartido e interconectado de todos los actores”.
La colaboración implica:
- Generosidad
- Empoderamiento
- Agilidad
- Adaptabilidad
- Organizaciones sin fronteras
- Confianza y transparencia
La diferencia entre organizaciones realmente colaborativas y las que no lo son, aunque lo reiteren permanentemente, es abismal y se aprecia con fuerza tanto en su ambiente de trabajo, en su atracción de talento, en la satisfacción de clientes y por supuesto en los resultados.
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Utilizar la tecnología como aceleradora del cambio y el crecimiento
“El verdadero progreso es el que pone la tecnología al alcance de todos”. Henry Ford
Podríamos decir que la tecnología está en el inicio y en el fin de los procesos de transformación.
En el inicio, porque ha sido la disrupción tecnológica la que ha motivado el cambio tanto de los modelos de negocio como de los comportamientos de los clientes.
Y en la etapa final de los ciclos de transformación, al ser las distintas herramientas tecnológicas la que están ayudando en la adopción de las nuevas formas de trabajar y relacionarnos. En definitiva en el cambio de hábitos.
En los distintos ámbitos del cambio: formación, colaboración, eficiencia, análisis… la tecnología está jugando un papel fundamental.
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Impulsar la innovación como el camino al futuro
“La innovación es la que distingue un líder de los demás” Steve Jobs
Identificar nuevas fuentes de ingreso se ha convertido, en la actualidad, en el reto de un buen número de empresas “tradicionales” y la innovación aparece como el único aliado para conseguirlo.
Es difícil encontrar alguna estrategia empresarial en la que la innovación no aparezca como uno de sus principales valores, pero también es difícil encontrar ejemplos en los que la innovación tenga un buen modelo que se esté implantado con rigor.
Realmente no es tan difícil, o quizás sí, es un tema de actitud y desarrollo de un modelo, que:
- Considere la innovación como estratégica
- Fomente de la creatividad a nivel global
- Piense en “abierto”
- Tenga un liderazgo reconocido
- Este orientada al negocio
- Tenga un presupuesto que no compita en cada momento con el “día a día y se gestione eficientemente
- Se mida
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Realizar una ejecución impecable
“No se puede cambiar el curso de la historia a base de cambiar los retratos colgados en la pared” Sri Pandit Jawaharlal Nehru
O lo que es lo mismo, no se pueden cambiar el curso de las organizaciones a base de cambiar los “power point” presentados en los Comités.
Esperada o inesperadamente la ejecución se ha convertido en el principal desafío de la transformación en las organizaciones, parece como si en muchas ocasiones se hubiera caído en el denominado “valle de las excusas”, con el “es que”:
- No tengo el presupuesto necesario
- Los resultados del trimestre son prioritarios
- No tengo tiempo
- Nos falta gente
- No estoy seguro esto sea lo mejor, tal vez tendríamos que “darle otra vuelta”
- …
Posiblemente la clave está en una pregunta ¿Con el plan definido se sitúa la compañía en el “lugar” definido (visión)?
Y si la respuesta es sí, el siguiente hito es pasar a la ACCION, es caminar hacia su visión, hacia su futuro … que para algo se ha definido.
En cualquier caso, la clave de una buena ejecución es Liderazgo, liderazgo y más liderazgo, que elimine excusas y adopte las decisiones que necesita la empresa para crecer de una forma sostenible e inteligente.
*Te animo a compartir otras citas que nos inspiren en la transformación
Una que apliqué siempre en los cursos de gestión de Riesgos: «No es más limpio quién más limpia sino quién menos ensucia»; no conozco el autor, pero la decía mi madre, jeje.
Un abrazo.
Muy buena Luismi!!!!