Si ya sabes lo que tienes que hacer y no lo haces, entonces estas peor que antes

Confucio

No es la primera vez que traemos al blog el tema de la ejecución de los planes, pero la realidad, está demostrando que se está convirtiendo en el gran reto de la transformación.

Distintos estudios han demostrado que el 70% de los fracasos en el desarrollo de las estrategias, se producen por mala ejecución.

La ejecución como dicen Larry Bossidy y Ram Charan en Execution “es un conjunto específico de comportamientos y técnicas que las empresas deben dominar para tener una ventaja competitiva. Es una disciplina en sí misma.”

Por lo tanto, no es algo que ocurra, sin más, a partir de un powert point presentado en un Comité. El proceso no se desencadena solo a partir del planteamiento … por muy bueno que éste sea.

Motivos de limitan la ejecución

Si analizamos los motivos que condicionan la ejecución de los planes y estrategias nos encontramos con:

  • Estrategias poco claras, en las que los directivos, en el mejor de los casos, saben lo que hay que hacer, pero son incapaces de trasladárlo con claridad a la organización.
  • Inexistencia de planificación, las iniciativas están más o menos claras, pero no existe una hoja de ruta que sirva de guía en el camino.
  • Comunicación insuficiente, sin sistemática ni transparencia.
  • Escasa involucración de la dirección, sin trasladar un compromiso claro y no siendo los primeros en adoptar los cambios.
  • Sin dinámica de seguimiento, que a partir de unos indicadores clave, permita analizar la evolución de la transformación y en su caso, adoptar las medidas correctoras adecuadas.

Comportamientos del líder que ejecuta bien

En su trabajo, Bossidy y Charan, identifican siete comportamientos esenciales en los lideres que ejecutan bien:

  • Conocen a su gente y su negocio: los líderes viven sus negocios y comprenden las realidades de su equipo.
  • Insisten en el realismo: muchas personas pierden el tiempo tratando de suavizar, sombrear o distorsionar la realidad. Como líder, piense y hable de manera realista e insista en que los demás hagan lo mismo.
  • Establecen metas y prioridades claras: un líder que tiene 10 prioridades probablemente no tenga ninguna. Defina algunas prioridades claras para que puedan concentrar sus esfuerzos.
  • Cumplen: más allá de tener metas altas y hacer los esfuerzos iniciales para lograrlas, debe cumplirlas y ser persistente.
    En un contexto de incertidumbre como el actual, generar confianza se ha convertido más que nunca en un valor clave.
  • Recompensan a los que hacen: la fórmula es sencilla, vincula las recompensas con el rendimiento. A menudo, no existe esta correlación.
  • Amplían las capacidades de las personas: cada interacción con un colega es una oportunidad de entrenamiento. Comparta su experiencia y perspectivas.
  • Se conocen bien a sí mismo: cuando aprendes sobre ti mismo, tus habilidades, fortalezas, debilidades y tendencias, desarrollas una cualidad llamada «fortaleza emocional». Esta es la capacidad de tratar bien a los demás, trabajar desde su fuerza interior, capear las tormentas y aceptar las opiniones de los demás, incluso si sus opiniones y perspectivas varían mucho de las suyas. Como líder que enseña a otros a ejecutar, debe conocerse a sí mismo.

Sí tanto las barreras como las características del líder “ejecutor” parecen claras ¿Por qué no se ejecuta mejor?

Una de las causas, posiblemente la más común, es la dinámica del día a día, en un doble sentido, por un lado, porque nos traslada la falsa percepción de que somos buenos ejecutores (y por lo tanto la ejecución no es un problema de la compañía) y por otro lado, nos impide dedicar la atención y los recursos al futuro.

Consecuencia: lo importante se deja sin hacer.

Como compartíamos en el post del 30-4-2018, Rafael Matesanz en su colaboración en “Digitalízate o desaparece” decía “… cuando hablamos de la importancia de la ejecución en el devenir de cualquier empresa, existen unos principios y unos procedimientos bastante comunes con independencia de que la estructura esté más o menos jerarquizada o bien sea puramente horizontal. Al final, los resultados de excelencia sólo se consiguen gestionando correctamente los recursos disponibles …”.

Para debate: ¿Estáis de acuerdo en situar la ejecución como el elemento clave para el éxito de la transformación de las organizaciones?

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6 comentarios de “La ejecución marca la diferencia

  1. Fernando Gómez de Calatrava dice:

    Hola de nuevo Adolfo,
    sin lugar a duda. Ya a principio de los años 80 los gurus del management decían: «No hay estrategias buenas o malas, si no hay estrategias que se implantan y otras que nunca se llevan a cabo».
    La transformación digital no deja de ser una estrategia, y su ejecución (implantación) es clave para lograr el éxito.
    Por cierto, cómo siempre eliges buenas lecturas. Ram Charan uno de mis favoritos.

    • Adolfo Ramirez dice:

      Fernando, la realidad es que tanto tu como yo hemos conocido magnificas estrategias (por lo menos en el papel) que lamentablemente no han tenido ni la oportunidad de validarse.

  2. Ferran Pi Roca dice:

    Creo que el primer reto es saber definir qué es y qué no es la transformación. Transformarse es asegurarse primero que quién no da de comer, el core business, se mantiene fuerte y optimizado. Ahí está la primera transformación que luego puede extenderse más allá.

    El segundo reto está en compaginar las tareas del día a día de tu core business, que nos suele tomar mucho tiempo en el día a día, con la ejecución de todas esas acciones nuevas y estratégicas que hayamos determinado para transformarse.

    • Adolfo Ramirez dice:

      Ferran, una vez más gracias por participar en el blog, conocer y decidir lo que tienes que hacer tanto en el día a día como en la transformación es sin duda el primer paso …. de la ejecución.

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