El sesgo de confirmación se refiere a nuestra tendencia a buscar y favorecer información que confirme nuestras creencias mientras que simultáneamente ignoramos o devaluamos la información que las contradice, comparte James Clear en su web.

“Sesgo de confirmación: un fenómeno omnipresente en muchas formas”

Raymond S. Nickerson

A nivel individual

El autor de “Atomic habits” lo explica con un ejemplo, la persona A cree que el cambio climático es un problema grave y solo buscan y leen historias sobre la conservación del medio ambiente, el cambio climático y las energías renovables. Como resultado, la persona A continúa confirmando y apoyando sus creencias actuales.

Mientras tanto, la persona B no cree que el cambio climático sea un problema grave, y solo buscan y leen historias que respalden cómo el cambio climático es un mito, por qué los científicos son incorrectos y cómo nos están engañando a todos. Como resultado, la persona B continúa confirmando y apoyando sus creencias actuales.

Cambiar de opinión es más difícil de lo que parece. Cuanto más creas que sabes algo, más filtras e ignoras toda la información en sentido contrario.

El poder de los algoritmos

¿Quién decide lo que compramos? ¿Lo que vemos? ¿Lo que leemos?

Para Durgan A. Nallar (autor de Diseño y narrativa transmedia), “No estamos decidiendo por nosotros mismos, sino que estamos viendo y consumiendo lo que el algoritmo decide por nosotros”.

La digitalización en general, el uso de la inteligencia artificial y el desarrollo de plataformas está suprimiendo los tiempos de espera, al eliminar ciertos intermediarios.

Se produce una situación en la que el consumidor tiene la sensación de que accede a lo que él exactamente quería. Lo cual, sin embargo, es relativo.

Realmente lo que ocurre es que los algoritmos ponderan el perfil consumidor del usuario y sus patrones de consumo actúan en base a eso,

Netflix usa algoritmos para sugerir contenido y crear programas basados en los hábitos de consumo y las preferencias de sus suscriptores, hasta el punto de que el 75 % del contenido consumido por los usuarios procede de alguna recomendación. Tal y como cuenta BBC, la popular serie de televisión House of Cards fue concebida por Netflix en base a un algoritmo que, tras manejar los gustos de sus usuarios, destacó tres valores clave que debería tener una serie de éxito: estar protagonizada por Kevin Spacey, dirigida por David Fincher y ser un drama político. Así nació House of Cards.

Según el informe “La búsqueda de conveniencia”, elaborado por Nielsen, son tres los factores más influyentes en la modificación de los hábitos de consumo y decisiones de compra:

  • La facilidad
  • La utilidad
  • La simplicidad

Sesgo de confirmación y transformación digital

Cuando el sesgo de confirmación hace su aparición en la estrategia de las empresas, su impacto es tremendamente negativo, y si además, ocurre en el contexto de la transformación digital sus consecuencias pueden llevar a la empresa a su desaparición.

En mi post ilusiones peligrosas, compartía alguna de las “confirmaciones” que se están produciendo en más de una compañía en el contexto de la digitalización:

  • Tenemos buenos resultados y estamos liderando el mercado, por lo que, con algunos ajustes, el futuro está garantizado.
  • El cambio de comportamiento en nuestro sector se está produciendo lentamente y tenemos tiempo para ir incorporando las ventajas de las nuevas tecnologías.
  • Nuestras barreras de entrada impedirán la entrada de nuevos competidores digitales en nuestra actividad.

 

Si nos trasladamos en el tiempo a las reuniones o comités de algunas de las empresas que fueron líderes de sus mercados y hoy han desaparecido seguro que nos encontramos con este debate y con un claro triunfador “el sesgo de confirmación”.

Un sesgo sencillo (los empleados dicen lo que quiere oír el jefe y el jefe oye lo que quiere oír) y muy peligroso (no hay pensamiento crítico y por lo tanto no hay crecimiento).

¿Cuántos líderes conocemos cuya estrategia es reforzar sus pensamientos y, por lo tanto, cada vez están más convencidos de los mismos?

Evitar el sesgo de confirmación no es sencillo. La mejor fórmula para limitar su influencia es analizar con mayor profundidad nuestras decisiones y escuchar y leer la información de la forma más objetiva posible. Una buena práctica, a todos los niveles (personal / profesional) es prestar especial atención a las opiniones contrarias.

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4 comentarios de “El sesgo de confirmación

  1. Fernando Gómez de Calatrava dice:

    Adolfo, muy interesante tu post.
    Es histórico y va con la naturaleza humana el leer y escuchar los medios que dicen algo similar a lo que pensamos nosotros.
    No es fácil encontrar líderes que aceptan el pensamiento crítico en sus organizaciones. Muchos lo consideran «deslealtad».
    Cada día me parezco mas a Groucho, soy capaz de cambiar mi opinión si alguien me lo explica y lo entiendo.

  2. Eduardo Vioque dice:

    Muy interesante, Adolfo. No conocía la teoría, pero es algo que vengo observando ( no solo en el ámbito profesional; también vale para casi todo, política, deporte, etc). y contra lo que vengo intentando luchar para que me pase lo menos posible, no siempre con buen resultado.
    Es realmente complejo escuchar sin rebatir . Sobretodo si eres vehemente en tus planteamientos y tienes sangre caliente y algunos años de mas.
    Pero no puedo estar mas de acuerdo. Se aprende si escuchas al contrario. Si te enrocas en tu ombligo, mala cosa.

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